Para los potenciales evocados auditivos, recibe un sonido corto y rápido por un auricular. Para los potenciales evocados somatosensoriales el paciente siente unos pequeños estímulos eléctricos en los pies y las manos.
Son útiles en el diagnóstico de enfermedades como neuritis óptica, esclerosis múltiple, sorderas, traumatismos craneales, lesiones de médula espinal o tronco del encéfalo, neuropatías, etc. Además sirven para el control evolutivo de enfermedades para evaluar su progresión o mejoría.